Seguridad de los vehículos de GLP:

En relación a la seguridad, existe un informe del RACE donde se explican todos los ensayos realizados. En la mayoría de los países europeos el montaje e instalación de sistemas de GLP en vehículos, sólo puede ser realizado por compañías homologadas, según el Reglamento 67 de la CEE. Se requiere una inspección técnica posterior antes de la puesta en circulación del vehículo, y unas inspecciones periódicas del equipo de gas durante el funcionamiento de éste.

El equipo de GLP lleva incorporado los siguientes dispositivos de seguridad:

  • Válvula de exceso de flujo que interrumpe la circulación de carburante en caso de que se produzca una fuga en la tubería.
  • Válvula de corte de carga del 80% que limita el llenado a un 80% máximo de la capacidad del depósito.
  • Válvula de exceso de presión tarada a 25 bares (montada en el depósito).
  • Depósito con caja hermética (que protege todos los accesorios) provista de dos respiraderos al exterior.
  • Válvula electromagnética de corte en el circuito de salida del depósito.

Riesgo de explosión e incendio

El GLP es almacenado y manipulado como un gas a presión en depósitos especiales con un grado de seguridad igual o mayor que la gasolina. Esto es debido a que la gasolina se almacena en forma líquida con el posible riesgo de fugas de líquido y escapes de vapores. La integridad y seguridad de los sistemas de GLP ha sido probada mediante las operaciones de muchos millones de instalaciones a lo largo de todo el mundo. Esto se debe a que el equipo de almacenamiento de GLP está construido y diseñado de acuerdo a las reglamentaciones y estándares de seguridad más exigentes.